Muchas personas deben seguir dietas bajas o en sodio debido a problemas como retención de líquidos o hipertensión arterial. Este tipo de personas, además de reducir o eliminar la sal de mesa en la cocina, deben también tener cuidado con aquellos alimentos que en su composición contienen sal, como las conservas, snacks, embutidos, quesos curados…
Una idea es mezclarlo con alimentos que presentan un sabor intenso a la hora de prepara por ejemplo unas tostadas. El aceite de oliva virgen, el ajo, la miel o la mermelada pueden ser nuestros grandes aliados.
Otra opción es usar condimentos y hierbas aromáticas para dar sabor al pan, como especias (pimentón, azafrán, pimienta), ácidos (limón, vinagre), hierbas aromáticas (hinojo, albahaca, mejorana, perejil, comino, tomillo, estragón, orégano, laurel), o aliáceos (cebolleta, ajo, cebollino, puerro, cebolla). No debemos olvidar la idea de macerar aceite y vinagre con hierbas aromáticas.
Podemos también combinar el pan con alimentos frescos como legumbres, hortalizas o verduras; o preparar ricos aperitivos como paninis o tostadas.
El caso es no renunciar a comer pan y disfrutar del mismo aunque sea sin sal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario