Muchas
veces al comprar alimentos nos dejamos llevar por la publicidad y el etiquetado
y elegimos aquellos donde aparece la palabra “light”. Pero no siempre este tipo
de alimentos son realmente más “ligeros” que sus homólogos “normales”. Por
ello, hoy os traigo unos trucos para escoger los verdaderos alimentos light.
-
Un producto light debe reducir en un 30% su valor energético respecto
a su homólogo normal: en algunos alimentos (batidos de leche, patatas fritas,
mermeladas…) esta diferencia no llega al 15%
-
Cuidado con los alimentos “con fructosa” o “sin azúcar”: aunque se
haya sustituido el azúcar o sacarosa por fructosa, no debemos olvidar que el
valor energético de ambos compuestos es el mismo, por lo que la cantidad de calorías
aportada por el producto no varía
-
Comparar la diferencia real de calorías entre productos: debemos
comparar dos productos de diferentes marcas, el light con el normal de la misma
marca… Muchas veces nos encontramos con que los alimentos bajos en azúcar, en
grasas o en calorías no son realmente tan bajos
-
Edulcorantes sin calorías: los productos donde se ha sustituido el
azúcar por edulcorantes acalóricos (sacarina, ciclamato, acesulfame o
aspartame) tienen menos calorías. Entre estos productos encontramos chicles,
galletas, mermeladas, zumos, refrescos o caramelos
-
Menos calorías pero mucha energía: productos como margarinas, patatas
fritas, patés o mayonesas light aportan menos calorías que los normales, pero
aún así siguen siendo muy energéticos y grasos
No hay comentarios:
Publicar un comentario